Publicidad: El castor

Con la Marce nos conocemos desde la época del colegio, aunque estudiabamos en lugares distintos. Al salir de cuarto medio, ingresé a estudiar relaciones públicas, mi amiga ya llevaba un año de publicidad en el mismo instituto.
Como éramos muy amigas, enganché también con sus compañeros, al punto que hasta los profesores me invitaban a oir sus clases, si es que yo tenía alguna hora libre...
Mucha gente pensaba que yo estudiaba publicidad y que estaba en cursos inferiores, es más, en broma los profesores me decían, que sería la única relacionadora pública egresada con una mención en publicidad...
Siempre he alabado la creatividad y el ingenio de ellos. Me encanta ese mundo.
Ver como nacen y posteriormente se va dando forma a las ideas y disfrutar con los proyectos de fin de año con resultados realmente buenos, maximizando los recursos, ya que obviamente no se contaba con tremendo presupuesto, era genial.
Ayudé en varios de ellos desde mi limitada capacidad, puesto que nunca he sido, ni buena para el dibujo, ni muy "creativa"... pero por lo menos, presté apoyo logístico un par de veces.
En fin, desde esa época que me ha gustado la publicidad.
Hay para todos los gustos: algunas son "inteligentes", otras crudas y directas como para crear conciencia de algún tema delicado, pero hay muchas que son graciosas y muy divertidas o llenas de ternura....
Como esta que les presento hoy, muy ad-hoc para estas fiestas que se avecinan y otras, que iré compartiendo en este "humirde blog".